Steve Jobs decía que no podés conectar los puntos mirando hacia adelante, solo podés hacerlo mirando hacia atrás. Y no fue hasta avanzados mis veinte que realmente descubrí quién yo era y cuál era mi propósito. Y ahí fue cuando, de pronto, todo mi pasado empezó a cobrar sentido.
Te invito a que recorramos juntos algunos momentos que marcaron mi vida y que me permitieron ir de a poco descubriendo quién soy: un emprendedor que busca inspirar y ayudar a otros a que puedan vivir de eso que los apasiona.
Ante todo, emprendedor serial
Empecé a emprender desde chico, cuando apenas tenía 12 años. En aquel entonces vivía en los Estados Unidos y empecé junto a mi hermano un pequeño negocio donde paleábamos la nieve de la entrada de nuestros vecinos luego de fuertes tormentas, para que pudieran sacar sus autos e ir a trabajar. Así fue como generé mis primeros mil dólares y mi primer emprendimiento.
Una dosis de orden y disciplina
A mis 18 años ingresé en la Facultad de Derecho (no me pregunten cómo terminé ahí). Lo cierto es que me aburría tanto en clase, que al año siguiente decidí tomar un trabajo en paralelo. ¿Pasante en algún estudio? No, pero buen intento.
Entré a trabajar en el Ejército Argentino como Granadero. Todos los sábados, domingos y feriados coordinaba visitas guiadas bilingües por el interior de la Casa de Gobierno. Allí aprendí el valor del orden y la disciplina.
DE ABOGADO CORPORATIVO A VENDEDOR AMBULANTE
Algunos años después, a mis 23, empecé a trabajar como abogado corporativo para diferentes compañías aéreas internacionales. Trabajaba de lunes a viernes, jornada completa, en una firma de derecho aeronáutico.
A los pocos meses, empecé a aburrirme y decidí embarcarme en paralelo en un nuevo desafío. Pero no cualquier desafío: empezaría a trabajar como vendedor ambulante los fines de semana y feriados. Poco después estaría facturando, en un fin de semana largo, casi el doble de lo que ganaba trabajando todo un mes como empleado del estudio.
A partir de este momento, decidí dejar atrás la relación de dependencia y mi título de abogado… para siempre.
CÓMO TRANSFORMÉ MI PEOR FRACASO EN UN ÉXITO ROTUNDO
Si bien mi proyecto anterior había funcionado muy bien, decidí cerrarlo ya que no escalaba. Entonces me embarqué en un nuevo emprendimiento: un programa de beneficios exclusivamente orientado al turismo internacional.
Hice todo lo que marcaba en “manual de negocios tradicional”: plan de empresa, proyecciones financieras, inversiones en producto, algunos empleados, oficina… a los pocos meses estaba fundido, luego de invertir y perder más de diez mil dólares que tenía ahorrados.
Y si bien la experiencia fue traumática, este proyecto me dejó las lecciones de negocio y liderazgo más importantes de mi vida, lecciones que luego capitalizaría para mis próximos emprendimientos y los de cientos de otros emprendedores…
Mentor de emprendedores
Siempre tuve mucha vocación por enseñar y ayudar a los demás a superarse y alcanzar sus propios objetivos. Decidí, luego de mi última experiencia, empezar a acompañar a otros emprendedores en esta aventura de crear sus propios negocios desde cero.
Algunos años (y más de 500 emprendedores) después, empecé a identificar con suma claridad las razones por las cuales fracasaban -y fracasan- nueve de cada diez emprendimientos antes de alcanzar el primer año de vida.
Me dí cuenta que estos errores no solamente eran predecibles, sino también evitables. También me di cuenta que quería impactar en un mayor número de emprendedores, hacerlo escalable.
CURSOS Y CHARLAS PARA EMPRENDEDORES
Analicé de forma exhaustiva y detallada mi experiencia tanto como emprendedor como mentor de otros emprendedores, y la complementé con cientos de libros que fui devorando acerca de negocios, estrategia y desarrollo personal.
Decidí transformar todo ese conocimiento acumulado en un curso presencial para emprendedores; un curso que los ayudara a dar sus primeros pasos en el mundo del emprendimiento, sin morir en el intento. En definitiva, lecciones que les permitiera evitar todos aquellos errores que tanto yo como muchos otros emprendedores cometemos al principio.
Durante cinco ediciones con casi cien egresados, fuimos haciendo todos los ajustes necesarios para optimizar al máximo el contenido y su formato pedagógico. Pero todavía faltaba una cosa…
ACADEMIA ONLINE PARA EMPRENDEDORES
Quería impactar en un mayor número de emprendedores y hacer la experiencia más accesible para todos. Esta vez, que pudieras hacerla desde donde quisieras y a tu propio ritmo.
Así creamos la Academia de Emprendedores Digital, una experiencia para que aprendas a crear tu propio emprendimientos desde cero, de forma segura y sin malgastar tiempo ni plata.
Una Academia que resume todas esas lecciones y herramientas con las que me hubiera gustado contar antes de aventurarme en mi primer emprendimiento.
¿Estás listo?
Creá tu propio emprendimiento desde cero de forma segura, sin malgastar tiempo ni plata.